Las bellas van a la universidad

Por Pedro Rodiz


Una de las motivaciones de la obra Sofía, que es el texto que escribo junto a Freddy Acevedo y del que hace tiempo no les comento, es que los personajes, los dos filósofos, están molestos porque le cerraron el Seminario de Filosofía para construir un Centro de Refinamiento y Modelaje. Quedé bruto cuando supe la noticia de que las bulímicas iban a hacer su espectáculo en el Teatro Universitario, no porque lo vayan a escenificar allí, sino por lo profético del planteamiento de una obra que aún no ha estrenado. ¡Ahora van a decir que nos copiamos!
No vayan a pensar que me opongo a que este “acontecimiento cultural” ocurra. Al contrario, qué mejor lugar para llevar a las bellas. Si en Humanidades es que van a recibir el adiestramiento más completo, el que necesitan para que “den lo mejor de sí”. En el Departamento de Filosofía les enseñarán sobre que “si yo me baño en un río, y al otro día me vuelvo a bañar en él, no es el mismo río”. En el de Historia aprenderán sobre Puerto Rico y las “junglas y selvas nuestras”. Aprenderán a hablar en inglés, en francés y hasta en español –de alguna manera tendrán que comunicarse, ¿no?-. Y en el Departamento de Drama les enseñarán a moverse sobre el escenario, a proyectar y por supuesto, a actuar. Estoy seguro que mi amigo Jorge Rodulfo no se negará a realizar voluntariamente tan valiosa aportación patriótica. Alguna de ellas podrá ingresar el Coro y obtener la exención de matrícula. Entre tanto estudios multidisciplinarios, aprenderán a usar las computadoras del Seminario José Robledo. Serán las modelos para las clases de arte y de fotografía. También serán la inspiración de los poetas y cuentistas. ¿Cómo es que a Magali no se le había ocurrido antes presentar este concurso en el Teatro Universitario? Ah, claro, estaba cerrado. Pero ya no hay excusas. Que Jofe no se deje intimidar por las turbas que no entienden de estas cosas. Que cuando estas jóvenes desfilen vestidas como Agüeybaná por el sacro santo escenario al compás del recientemente órgano instalado –me refiero al instrumento musical, ¿a cuál otro, si no?- se le pararán los pelos a Donald Trump. Y que no se olviden de incluir en el jurado al inmortal, a la leyenda: Milton, (el que no existe). Porque entonces sí que protesto, me amarro a la Torre a lo Tito Kayak. Que el Consejo de Estudiantes no se queje tanto, que podrán ver gratuitamente tan despampanante derroche de belleza, laca y escarcha… por televisión.

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Actualización

Salió un comunicado en el que anuncian que la Gala de las bellas no va porque y cito: "por desprendimiento del yeso del techo" -estoy en el piso riéndome como demente- ¿Pero no habían remodelado ese Teatro hace poco? ¿Qué se cae el yeso del techo? -risas, risas, risas, es un excusa simplemente genial, vuelven las risas que se convierten en carcajadas- ¿No será que el espirítu de Alfonso que realizó un sabotaje?